Actualización de la IMSS en la Modalidad 40: Nuevos Requisitos para Continuar CotizandoEl IMSS anunció cambios en la Modalidad 40 (continuación voluntaria en el régimen obligatorio) que implican nuevos requisitos de inscripción, ajuste en la cuota y plazos límite para quienes desean fortalecer su pensión bajo la Ley del Seguro Social (1973).
La Modalidad 40 permite que ex trabajadores o independientes sigan cotizando para mejorar su pensión.
La Modalidad 40 del IMSS, también conocida como Continuación Voluntaria en el Régimen Obligatorio, representa una opción clave para quienes dejaron de cotizar bajo contrato formal y desean incrementar las semanas de cotización o el salario base para alcanzar una pensión más favorable bajo la Ley 73.
Con los recientes ajustes anunciados por el organismo, las condiciones de acceso y permanencia se han modificado a fin de garantizar mayor certeza financiera y evitar abusos. En concreto, el instituto ha informado que la cuota aplicable para quienes opten por este régimen se calcula ahora sobre un 14.438 % del salario base elegido, con un límite establecido para evitar incrementos desproporcionados respecto al último salario registrado.
Se requiere que el solicitante haya cotizado al menos 52 semanas en los últimos cinco años antes de haber causado baja del régimen obligatorio y que dicha baja no tenga una antigüedad mayor a cinco años. Además, la inscripción solo procede una vez que la relación laboral formal ya ha concluido, por lo que quienes aún se encuentren activos bajo ese régimen no pueden incorporarse.
Con respecto al trámite, está habilitado tanto en línea como de forma presencial: por internet mediante la captura de CURP y correo electrónico, y presencialmente en la subdelegación correspondiente presentando identificación oficial, NSS, CURP y comprobante de domicilio. El proceso concluye con el registro del pago, lo que formaliza la inscripción al régimen.
Entre los beneficios de este esquema figuran la continuidad de cotización al sistema obligatorio, la posibilidad de registrar un salario base mayor al último percibido (dentro del límite reglamentario), conservación de los seguros de invalidez y vida, así como el seguro de retiro, cesantía en edad avanzada y vejez. Además, se activan aportaciones a la Afore para retiro y cesantía, y se recibe la cuota social correspondiente.
No obstante, el cumplimiento de los nuevos requisitos implica una obligación de planeación: la persona interesada deberá conocer su historial de semanas cotizadas, calcular el impacto de elegir un salario base mayor y realizar los pagos correspondientes para mantener el derecho abierto. En este sentido, el ajuste de la cuota y la exigencia de cumplir con un historial reciente muestran que la Modalidad 40 sigue siendo una herramienta atractiva, pero ahora con criterios más rigurosos que demanda verificar la elegibilidad antes de incorporarse.
