Congresistas de EE.UU. Presionan para Activar Panel del T‑MEC contra México por PEMEX y CFEUn grupo bipartidista de congresistas de los Estados Unidos impulsa que su gobierno inicie un proceso de arbitraje comercial al amparo del T‑MEC, argumentando que las políticas energéticas mexicanas favorecen a Petróleos Mexicanos (Pemex) y Comisión Federal de Electricidad (CFE) en desmedro de empresas de EE.UU.
Legisladores estadounidenses respaldan acción contra México por supuestas distorsiones en el mercado energético que violan el T‑MEC.
Legisladores tanto demócratas como republicanos en la Cámara de Representantes de los Estados Unidos presentaron una iniciativa destinada a exigir a la Administración estadounidense la activación de un panel de arbitraje comercial contra México bajo el marco del T‑MEC. Esta solicitud se fundamenta en la afirmación de que las políticas energéticas de México favorecen de forma injusta a las empresas estatales Pemex y CFE, incumpliendo obligaciones de trato nacional y libre competencia estipuladas en dicho tratado.
La iniciativa señala que estas distorsiones ponen en desventaja a compañías estadounidenses del sector energético y de otros ramos conexos, por lo que piden al gobierno de EE.UU. ejercer pleno respaldo para exigir cuentas a México y hacer valer los compromisos comerciales trilaterales. En su exposición, los congresistas expresan que el mercado energético debe ser tratado con imparcialidad independientemente de su origen.
Las quejas se concentran en normas aprobadas por México que otorgan prioridad a la electricidad y al gas suministrados por CFE y Pemex, así como en trámites de importación de productos energéticos que se consideran excesivos o discriminatorios. Además, se destaca que las autoridades mexicanas han incrementado las inspecciones aduaneras y regulaciones que complican la participación de empresas extranjeras.
Desde 2022, la Administración estadounidense ya había iniciado consultas formales con México en el marco del T‑MEC sobre el sector energético, lo que deja abierta la posibilidad de avanzar hacia la conformación de un panel de solución de controversias si no se logra un acuerdo en las consultas.
Estas gestiones sitúan el asunto en la agenda bilateral como uno de alto impacto para la relación comercial entre México y Estados Unidos, justo en el periodo previo a la revisión general del T‑MEC prevista para 2026.
