El finiquito laboral es un documento esencial en el derecho laboral mexicano, que representa la liquidación de las obligaciones económicas entre un empleador y un empleado al finalizar la relación laboral. Este proceso implica la compensación de todas las prestaciones que el trabajador tiene derecho a recibir, asegurando una separación justa y legalmente conforme.
El finiquito incluye diversas prestaciones acumuladas durante el periodo de trabajo, tales como salarios pendientes, vacaciones no gozadas, prima vacacional, aguinaldo proporcional y cualquier otra prestación pactada en el contrato laboral o establecida por la ley. La Ley Federal del Trabajo (LFT) regula estos conceptos y asegura que los trabajadores reciban un trato justo al finalizar su empleo.
Uno de los componentes principales del finiquito es el salario pendiente. Esto abarca cualquier cantidad de dinero que el empleador debe al trabajador por el tiempo trabajado pero no pagado hasta la fecha de terminación. Es crucial que el empleador pague el salario pendiente hasta el último día de trabajo del empleado, para evitar conflictos y asegurar un proceso de terminación de empleo sin contratiempos.
Las vacaciones no gozadas también forman parte del finiquito. La LFT estipula que los trabajadores tienen derecho a un periodo anual de vacaciones pagadas, que aumenta con la antigüedad. Si el trabajador no ha tomado todas sus vacaciones al momento de la terminación, el empleador debe pagar una compensación por los días de vacaciones no disfrutados. Además, se debe incluir la prima vacacional, que es un 25% adicional sobre el salario correspondiente a los días de vacaciones no gozados.
El aguinaldo proporcional es otra prestación que debe ser liquidada en el finiquito. La LFT establece que todos los trabajadores tienen derecho a un aguinaldo anual equivalente a 15 días de salario, pagado antes del 20 de diciembre. Si la relación laboral termina antes…