Las personas jubiladas o pensionadas reciben ingresos regulares tras haber concluido su vida laboral, ya sea por edad, tiempo de servicio o condiciones de salud. Para aclarar las obligaciones fiscales de este grupo, la Procuraduría de la Defensa del Contribuyente (Prodecon) lanzó recientemente una guía que establece ciertos requisitos y responsabilidades fiscales. Según la Prodecon, quienes tributan bajo el régimen de sueldos y salarios o ingresos asimilados deben proporcionar a sus retenedores los datos necesarios para realizar las retenciones de ley. Además, deben presentar una declaración anual en algunos casos específicos, como cuando reciben ingresos adicionales a su jubilación, si han notificado al retenedor sobre su intención de presentar la declaración, si perciben ingresos de dos o más empleadores, si obtienen ingresos del extranjero, o si sus ingresos anuales superan los 400 mil pesos.
La guía también menciona que las personas con ingresos exclusivamente de un solo empleador, que no excedan los 400 mil pesos, y que no trabajen para más de una fuente al mismo tiempo, están exentas de presentar la declaración anual. No obstante, es fundamental que estos contribuyentes cumplan con lo que establece el artículo 150 de la Ley del Impuesto sobre la Renta (LISR). En caso…