Para que el SAT acepte tus deducciones y puedas obtener una devolución, es fundamental tener facturas electrónicas (CFDI) válidas de todos tus gastos deducibles. A continuación, te detallamos los pasos esenciales para facturar correctamente y asegurar que todas tus deducciones sean válidas.
Primero, asegúrate de reunir tus datos fiscales antes de solicitar cualquier factura. Esto incluye tu RFC, régimen fiscal, domicilio fiscal y un correo electrónico válido. Tener esta información a la mano agilizará el proceso de facturación y evitará errores. Segundo, solicita la factura en el momento de la compra. Muchos comercios no permiten emitir facturas después del pago, por lo que es crucial pedirla inmediatamente. Tercero, verifica que la información sea correcta. Asegúrate de que el RFC y el régimen fiscal estén bien registrados. Un simple error en estos datos puede invalidar la factura, lo que afectaría tu posibilidad de deducir el gasto.
Es importante confirmar también el método y forma de pago al facturar. De acuerdo con el SAT, los pagos deducibles deben realizarse mediante cheque nominativo, transferencia electrónica, o tarjeta de crédito o débito. Las facturas de pagos en efectivo no son deducibles. Por último, recibe la factura ya…
Asegúrate de que tus facturas cumplan con los requisitos del SAT.
