El proceso de fusiones y adquisiciones (M&A) en México está regulado por un marco legal robusto que busca promover la competencia, proteger a los accionistas y mantener la estabilidad del mercado. Comprender este marco es esencial para cualquier empresa que considere participar en una fusión o adquisición en el país.
Uno de los principales organismos encargados de supervisar las fusiones y adquisiciones en México es la Comisión Federal de Competencia Económica (COFECE). Este organismo tiene la responsabilidad de evaluar las transacciones para garantizar que no se generen monopolios o prácticas anticompetitivas que puedan perjudicar al mercado y a los consumidores. La Ley Federal de Competencia Económica (LFCE) establece los criterios y procedimientos que deben seguirse para la notificación y autorización de estas transacciones.
Para determinar si una transacción debe notificarse a la COFECE, se consideran varios umbrales financieros. Estos umbrales incluyen el valor de los activos de las empresas involucradas en la transacción y el monto de la transacción misma. Si se superan estos umbrales, las empresas deben presentar una notificación formal a la COFECE antes de cerrar la transacción. La COFECE tiene un plazo específico para revisar la notificación y emitir una resolución, durante el cual puede solicitar información adicional o imponer condiciones para mitigar posibles efectos anticompetitivos.
Además de la revisión de la COFECE, las fusiones y adquisiciones en México también están sujetas a la supervisión de la Comisión Nacional Bancaria y de Valores (CNBV) en casos donde las empresas involucradas sean emisoras de valores en el mercado de capitales. La CNBV se asegura de que las transacciones cumplan con las regulaciones del mercado de valores y protejan los derechos de los accionistas minoritarios. La Ley del Mercado de Valores (LMV) establece los requisitos para la divulgación de información y la transparencia en las transacciones de M&A, lo…