Con una contundente mayoría de 110 votos a favor y solo cinco en contra, el pleno del Senado mexicano aprobó esta mañana la polémica reforma que prohíbe el uso de vapeadores y endurece las medidas contra el uso ilícito de fentanilo. La discusión, cargada de argumentos en favor y en contra, se centró en los efectos de estas sustancias en la salud pública, especialmente entre adolescentes, y las implicaciones de criminalizar su consumo.
El senador Ricardo Anaya, del Partido Acción Nacional (PAN), cuestionó en tribuna la hipocresía dentro del recinto legislativo, asegurando que muchos parlamentarios utilizan vapeadores y buscan lugares ocultos, como los baños, para hacerlo. Anaya destacó que el pleno está "atascado de vapeadores" y que la medida podría ser vista como incongruente si no se respeta dentro del propio Senado.
Por otro lado, Enrique Inzunza, senador de Morena, defendió la reforma señalando que representa un esfuerzo integral para abordar problemáticas urgentes relacionadas con la salud pública y la seguridad. Inzunza enfatizó que el uso de cigarrillos electrónicos y el fentanilo ha desencadenado crisis de salud y seguridad, especialmente entre adolescentes. Además, subrayó que la prohibición es una respuesta del Estado mexicano para garantizar el derecho fundamental a…